El otro día tuvimos el privilegio de realizar una jornada de emprendimiento rural inolvidable en San Vicente de la Sonsierra. Emprendedores, empresarios y desempleados se unieron para compartir conocimientos, establecer conexiones valiosas y explorar nuevas oportunidades de crecimiento en el entorno rural.
La jornada fue un éxito. Inspiradores testimonios de emprendedores locales, expertos en el campo del emprendimiento y dinámicas interactivas enriquecieron la experiencia de los asistentes, brindándoles valiosos conocimientos y herramientas para impulsar sus proyectos. Pero esto es solo el comienzo.
La jornada comenzó con una cálida recepción por parte de Mayang, propietaria del alojamiento turístico La casona del boticario que albergó el evento. Mayang dio la bienvenida a los asistentes en una sala con vistas panorámicas a la impresionante sierra. Posteriormente, se realizó una presentación del COE, explicando su origen en Logroño y su expansión al ámbito rural, destacando los 22 talleres que ADRA llevará a cabo.
Mayang, emprendedora y propietaria del Hotel Casonal Boticario, compartió su inspiradora historia empresarial y cómo ha evolucionado su experiencia laboral en la región. A continuación, se dio paso a las presentaciones individuales de los asistentes, quienes representaban diversos sectores, como el turismo, el marketing digital para la promoción del patrimonio cultural de La Rioja, la restauración y la agricultura.
Uno de los momentos destacados fue la dinámica de coaching dirigida por Verónica, en la cual se realizó un análisis DAFO (debilidades, amenazas, fortalezas y oportunidades) colaborativo. Los participantes compartieron sus puntos de vista y se identificaron las fortalezas y oportunidades específicas de tener un negocio en el medio rural.
Tras el trabajo intenso, los asistentes disfrutaron de un pequeño aperitivo con delicias locales, como chorizo, quesos y mermeladas artesanales, proporcionados tanto por los emprendedores presentes como por el alojamiento turístico. Además, se realizó un recorrido por las instalaciones del establecimiento, que recibió elogios por su calidad y servicio.
La jornada concluyó alrededor de las 9:30 p.m., superando ligeramente el horario previsto debido a la participación activa y las valiosas interacciones entre los participantes. El evento resultó ser un éxito, fomentando el espíritu emprendedor y promoviendo el potencial económico del medio rural. ADRA y sus colaboradores seguirán impulsando este tipo de iniciativas para fortalecer la comunidad empresarial y el desarrollo sostenible en la región.
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